Todo negocio, desde el más pequeño y hasta la empresa más grande se originan de la misma forma: a partir de una motivación que con esfuerzo se convierte en una idea de negocio.
Convierte tu motivación en una idea de negocio y echa a andar un emprendimiento que transforme tu vida profesional y personal.
Comienza por analizar los elementos que intervienen en tu idea, por ejemplo:
¿Cuál es el producto o servicio que ofrecerás?
¿A quién está dirigido ese producto o servicio?
¿Por qué piensas que este producto o servicio es necesario?
La Secretaría de Economía tiene un taller denominado: Paso a paso del emprendimiento, diseñado por la Unidad de Desarrollo Productivo que puede ayudarte a dar este primer paso.
Ya tienes una gran idea, sabes que se necesita para echarla a andar, analizaste todos los puntos anteriores, pero... No tienes los recursos. ¿Qué haces? ¿Te rindes? Claro que no.
No olvides que es muy importante desarrollar el modelo y el plan de negocio. Esto te ayudará a reconocer los recursos que necesitas para echar a andar tu emprendimiento y plantear la estrategia correcta para ir por ellos y conseguirlos.
Cuando decides emprender un negocio, los recursos económicos son de vital importancia, representan la cantidad de dinero que tienes como patrimonio, incluyendo tus bienes y tu capacidad tanto de endeudamiento como de financiamiento externo.
Estos son fundamentales para poner en marcha y mantener al resto de los recursos de la empresa operando. El problema es que no existen suficientes fuentes de financiamiento. Puedes recurrir a tus propios ahorros, a pedir prestado con familiares y amigos, pero muchas veces ese capital no es suficiente.
Pero no te preocupes para eso cuentas con Olimer KPTL, que te ofrece un crédito para poder emprender y lo mejor ¡Tú decides cuánto y cómo pagas!
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