Para remodelar tu casa primero debes definir que es lo que buscas, cuál es tu objetivo. ¿Quieres cambiar el diseño o más bien redistribuir tus espacios, o de plano necesitas ampliarla? Definirlo claramente te evitará gastos innecesarios y muchos dolores de cabeza.
Posteriormente, enlista todo lo que requieres para lograr ese objetivo: arquitecto, albañiles, materiales, pintura, pisos, tapices, todo lo que implique este proceso. Define claramente cuales son las modificaciones que pretendes hacer, para facilitar el proceso de la cotización del trabajo y los materiales. Lo más recomendable siempre es recurrir a los profesionales. Si tu no eres arquitecto o ingeniero, evita tratar de llevar a cabo los trabajos tú mismo. No ahorrarás mucho y corres el riesgo de gastar más.
De preferencia, contrata a un profesional recomendado por algún conocido, para evitar sorpresas posteriores. Recuerda pagar el monto que te solicitaron hasta que el trabajo se encuentre terminado y que estés completamente satisfecho. Nunca pagues por adelantado, ya que esto se presta a fraudes o trabajos mal realizados.
Es muy importante tenerlos planos de tu casa, tanto de construcción como de las instalaciones eléctricas y de agua, ya que éstos son la guía para solicitar un trabajo de albañilería o plomería, evitando romper tuberías o realizar una construcción sobre una estructura equivocada o mal elaborada, lo que podría generar gastos no previstos. Este es uno de los motivos por lo que resulta indispensable contratar personal especializado que conozca del tema y responda por su trabajo.
Dentro de tu presupuesto, debes considerar al menos, un cinco por ciento extra para gastos imprevistos; pues en ocasiones, a pesar de que exista una excelente planeación, pueden surgir gastos adicionales por factores que no consideramos al principio. Más vale contar con un monto de dinero para ahorro u otra remodelación que sufrir por faltantes que nos obliguen a dejar pendiente o inconclusa la obra.
Todas las remodelaciones son distintas, por eso debes crear un plan de acuerdo a sus necesidades y presupuesto para que, en base a estos factores, busques los elementos adecuados al menor costo posible.
Recuerda que no debes derrochar dinero en este tipo de cambios, pero tampoco escatimar en gastos. Valora el tiempo que piensas habitar la casa y analiza prudentemente los elementos que realmente requieren cambios.
En caso de que no cuentes con el presupuesto suficiente, puedes solicitar un préstamo a tu app Olimer KPTL, para que logres remodelar a tu gusto.
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